miércoles, 30 de abril de 2014

Excursión a Askja

El gran DÍA había llegado, Askja!!!
Una excursión que antes de ir nos habíamos planteado si hacerla o no en muchas ocasiones, y no precisamente porque no mereciera la pena, sino porque supone adentrarse en las Tierras Altas de Islandia, y esto puede suponer cierto riesgo si se hace por libre.
Askja, es un lugar muy especial de Islandia, uno de esos sitios que cuando lees o ves fotos sobre él inmediatamente sabes que quieres ir. Se trata del cráter más grande de la caldera volcánica de Dyngjufjöl, situada al norte del Vanatjökull, el mayor glaciar de Islandia.
Un remoto lugar, de difícil acceso y solo posible durante los meses de Junio a Septiembre, dependiendo siempre de la climatología. Imprescindible un 4x4, pues son carreteras F sin asfaltar y estar dispuesto a vadear ríos.

La pregunta que uno se hace cuando decide ir es : ¿Askja por libre o en tour organizado?
En nuestro caso cuando te enteras que en un viaje organizado el precio puede rondar los 200 euros por persona!!! las opciones se reducen al "por libre" o... nada.



17 de Agosto de 2013

Aquel día nos levantamos muy temprano, con nuestros ojos puestos en el cielo plomizo que amenazaba lluvia, pero bueno... eso parecía que era ya algo normal. Lo peor era la niebla, pero como era todavía muy pronto aún teníamos fe en que el día acabara levantando.
Durante el desayuno una familia hablaba de la excursión que habían hecho el día anterior en un tour organizado a Askja, así que era la mejor ocasión para preguntar cómo estaba el tema. Precisamente comentaban que la excursión era excesivamente cara y que creían que hubieran podido hacerla perfectamente ellos con su 4x4. En definitiva, nos animaron a que al menos lo intentáramos! El último empujón que necesitábamos ;-)

Antes de contaros nuestra experiencia en Askja por libre, quiero decir que leímos varias opiniones sobre esta excursión, desde gente que la recomienda sin ningún problema, otros que piensan que es arriesgar mucho y que ante la posibilidad de quedarse tirados lo mejor era en un tour, e incluso los que lo intentaron y finalmente a medio camino desistían y daban la vuelta.
Todo son opiniones y aunque yo os diría SÍ a la excursión por libre, supongo que variará mucho en cuánto a la habilidad o confianza que se tenga en vadear ríos, el tipo de 4x4 que se lleva (ya que cuanto más grande mejor) y por supuesto el tiempo que hace ese día o incluso en días anteriores. De hecho, se recomienda pasar por el centro de información antes de adentrarse a la aventura...

¿Cómo llegar a Askja? ¿Y cuál es el mejor punto de partida?

El mejor punto de partida es desde Myvatn
, ya que no hay muchos kilómetros hasta donde se coge el desvío, la F88, que nos llevará a Askja. La vuelta se puede hacer por la misma o por la F910, si uno se dirige al este. El motivo de estar próximos al punto donde comienza la pista de tierra, es porque la excursión se hace bastante pesada, ya que los 100 kms que distan hasta allí probablemente nos lleve hacerlo entre 3,5h-4h, así que podéis imaginaros como es el camino!

Un dato importante antes de comenzar la excursión es llevar el depósito lleno ya que no encontraremos ninguna gasolinera en el camino.


Emocionados y nerviosos por lo que nos depararía el día, comenzamos la excursión por la F88, que en el primer tramo aunque solo es polvo y piedras, aún se lleva bien.


El paisaje es desolador y no vemos ni un solo coche, se nos ha hecho un poco tarde y los tours salen muy temprano. Eso tiene su parte buena, pero también su parte mala, sobre todo cuando se trata de un sitio en el que no hay absolutamente nada, ni si quiera cobertura... y la experiencia cruzando ríos se reduce a Landmannalaugar... Salir muy temprano en estos casos puede ser recomendable,  pues lo ríos según avanza el día van aumentando su caudal.
El camino se va estrechando, y el suelo cada vez más abrupto y lleno de piedras pone a prueba las ruedas de nuestro 4x4 por la extensa llanura de lava Ódaðahraun que ocupa unos 5000 km²!
A nuestra izquierda el río glaciar Jokulsá transcurre con fuerza, y nos olemos que pronto llegaran los primeros vadeos.

Algunos consejos para vadear ríos:
- Usar una marcha muy corta o la reductora, evitando una ola y que entre agua en el motor.
- Ir a velocidad constante.
- Cruzar por donde el agua este más clara, nunca turbia.
- Nunca ir recto, intentar cruzarlo haciendo una V, como en semicírculo.

Y así irremediablemente llegaron los primeros vadeos, nos bajamos, examinamos el lugar y vemos un cartel con un pequeño dibujo que traza la línea por donde es mejor cruzar el río. Nos envalentonamos y allí vamos! Estos primeros no parecen tanto, quizás la anchura de algunos es lo que preocupa un poco porque no se sabe muy bien cuánto hay de profundidad.



Tras estos paisajes desérticos llegamos al pequeño oasis de Herðubreiðarlindir, a los pies de la montaña Herðubreið, más comúnmente llamada por los islandeses como "la Reina de las Montañas". El verde vuelve aparecer debido a las corrientes de agua subterráneas que hay bajo la capa de lava de Ódaðahraun. Aquí hacemos una breve parada junto a la oficina de información para ver la zona, aunque mala panorámica podemos sacar de Herðubreið, que aparece cubierta de niebla.


En este sitio también se encuentra el refugio de Eyvindur Jónsson, quien fue desterrado a las Tierra Altas por robar ovejas. Antiguamente esta era un práctica bastante común y solo eran perdonados si podían resistir allí 20 años! Casi nada!


Retomamos el camino, y de nuevo el terreno se vuelve aún más pedregoso que antes. Un paisaje casi lunar, en el que a veces es difícil distinguir la pista del mismo paisaje y en otras se hace tan estrecha que rezamos con no encontrarnos con nadie.
Para que os hagáis una idea de lo inhóspito del lugar, este fue el sitio escogido por la NASA para sus entrenamientos de preparación de aterrizaje en la Luna.

Casi poco antes de llegar se encuentra el refugio Dreki, donde hacemos la última parada. Al bajarnos del coche ya empezamos a notar que la temperatura había bajado bastante.
Aquí hay una zona de acampada donde hacen noche los que quieren aprovechar para hacer la excursión de la garganta Drekagil , "el cañón del Dragón", cuyo punto de partida esta justo detrás del refugio. Nos asomamos para ver el barranco y aunque el sitio parece que llama a explorar, no teníamos tiempo para ello. Hay que seguir, los coches que hemos visto son todos de vuelta, ninguno de ida, y ya es casi medio día.


Por fin llegamos al parking , cada vez estamos más cerca de la gran caldera de Askja. Desde allí tenemos que caminar unos 30 minutos. Hace muchísimo frío, y avanzamos por un terreno totalmente lunar. La sensación es rara, un lugar inhóspito que nos envuelve en una niebla tan espesa que apenas somos capaces de ver ni lo que tenemos a 200 metros delante de nosotros, lo que le da aún más misterio.
El viento es helador pero nos permite a momentos disfrutar de algunos claros, aunque... miremos donde miremos no hay absolutamente nada. El terreno a veces rojo, a veces negro, empieza a estar cubierto en determinadas zonas por nieve.
Y entonces...llegamos frente a la inmensa caldera de Askja de 50km²! con las vistas del cráter Viti (infierno, en islandés) y sus blanquecinas aguas, que marcan exactamente el punto de explosión que dio origen a la caldera, y más al fondo el gran lago Öskjuvatn, que se formó años después, cuando debido a la actividad de Askja se produjo un nuevo hundimiento dando lugar a una nueva caldera dentro de ella que se llenó de agua. 

                        
Allí estábamos frente a ellos, frotándonos los ojos para creérnoslo y bueno...también para verlos! La espesa niebla no dejaba ver con claridad el gran lago Öskjuvatn, y casi que daba miedo caminar por el mismo borde del cráter, precisamente porque a penas se veía nada. No podíamos creernos que después de haber llegado hasta aquí no pudiéramos disfrutarlo. Decidimos esperar y tuvimos la suerte que el viento iba deshaciendo esos espesos bancos de niebla. Había que aprovechar!

Una de las atracciones de esta excursión puede ser bañarse en las aguas de Viti, y la idea era esa pues llevábamos hasta el bañador y la toalla, pero con el frío que hacía pensamos que sería una locura y luego una vez allí... por momentos me arrepentí! Solo me quedaba como algunas personas de las que estaban a remojo en ese agua que más parecía leche, bañarme como vine al mundo pero después.... qué frio! Supongo que si las aguas estaban calientes no apetecería salir, pero estar ahí dentro y saber que ahí hay actividad....uuuuy qué yuyu! ;-)
Si aún no estas del todo muy convencido, mira la bajada que después será subida y lee los carteles que te avisan del peligro al bajar porque el suelo estaba muy resbaladizo. Vamos que alguno de nosotros se cayó en todo el fango que había por allí sin necesidad de mostrar la hazaña de bajar hasta abajo, pero de esto no tenemos foto jejjejeje
Finalmente, no nos bañamos, aunque yo lo recomiendo, y si volviera a ir, desde luego no dejaría escapar la oportunidad.


Aprovechando esos claros decidimos bordear un poco el cráter Viti y asomarnos a ver el gran lago Öskjuvatn, el más profundo de Islandia, con 220 metros y de un azul intenso. Las dimensiones no pudimos apreciarlas con claridad, porque no llegamos a verlo totalmente despejado. En este lago uno si que no puede bañarse porque o bien moriría congelado o sería tragado por las corrientes y remolinos. De hecho, cuentan la historia de que unos investigadores alemanes en 1907 mientras hacían unos estudios remando en su barco desaparecieron y nunca hallaron sus cuerpos.


La primera parte del viaje a Askja había sido superada, pero ahora tocaba regresar. La vuelta, sin duda, fue más dura porque con el cansancio el camino de retorno se hacía infinito, pero aún la excursión a Askja tendría su punto de emoción que nos mantendría despiertos.
Empezamos a notar que cada vez que tocaba un vadeo, el agua había subido, hasta que llegó el ...VADEO! Me bajé del coche, definitivamente llevaba mucha más agua, tanta que veía hasta corrientes, y como era tan ancho cómo me iba a meter para ver la profundidad! 
Guillermo con tantos vadeos iba cada vez más confiado y si fuera por él sé que hubiera tirado sin pensárselo, pero en estos casos valía más prudencia.
Entonces barajamos otras posibilidades para cruzar, pero imposible, el lugar marcado parecía aún así el "mejor"! Esperaríamos a ver si pasaba algún coche y así podríamos ver cómo estaba realmente. La demostración vino de un par de valientes y locas, en un coche más o menos como el nuestro, que tiraron sin pensárselo todo recto, haciendo algo más que una ola. Juro haber visto ese coche navegar, y por un momento pensamos que iban a quedarse allí en medio, pero aún así salieron airosas. La verdad que la idea de verme en medio del río esperando a que alguien viniera por nosotros no sé si me molaba mucho, y menos por cuánto podría salir la broma, pero allí no podíamos quedarnos y después de la demostración de las fitipaldis no tendríamos problema en cruzarlo.
Aunque grabar desde dentro del coche no se ve igual, aquí os dejo esos breves momentos de gran tensión que no sabía si grabar o cerrar los ojos. Qué nervios! jejejjeje


De vuelta a Myvatn, el mejor sitio donde podíamos ir a relajarnos para quitar la tensión de la conducción es en los baños termales. No son tan grandes (ni tan caros) como el Blue Lagoon en Reykjavik, pero os aseguro que eran perfectos.



Salimos como nuevos, y eso que dudábamos como siempre por el frío que hacía fuera, pero es que definitivamente es lo mejor que hay!!!


                                                                                      TO BE CONTINUED...





jueves, 10 de abril de 2014

Fiordos del Este, Detifoss y llegada a Myvatn

Hoy tocaba día de carretera, y avanzar hacia el norte, aunque la intención era aprovechar el camino para ver algo de los fiordos del este.
Nuestro paso el día anterior por la laguna glaciar de Jokulsarlon había dejado el listón muy alto en el viaje, así que veríamos como podía seguir sorprendiéndonos Islandia.

15 de Agosto de 2013

Dejábamos Höfn y avanzamos por la Ring Road hasta Djúpivogur, un pequeño pueblo pesquero en la bahía de Berujordur. Se trata del puerto más antiguo de los fiordos del este, y un punto para empezar apreciarlos. Nosotros aprovechamos para hacer una breve parada, estirar las piernas y dar una vuelta por el pueblo, aunque sinceramente no nos llamó mucho la atención.